La masa crítica de la prosperidad: Cooperativa La Juanita

Dos panaderos de la Panadería Comunitaria “La Masa Crítica” en la Cooperativa La Juanita, en la región de La Matanza de la provincia de Buenos Aires, Argentina, el martes 16 de octubre de 2018. (AtlasNetwork.org Fotografía/Rodrigo Abd)

Con una completa programación educativa y empresas en crecimiento, la cooperativa, situada en un concurrido barrio urbano a unas 5 millas de la capital argentina, está llena de personas de todas las edades, muchas de las cuales participan activamente en el aprendizaje de nuevos oficios o habilidades.

Panaderos de la Panadería Comunitaria “La Masa Crítica” de la Cooperativa La Juanita preparan una tanda de medialunas, uno de los productos de panadería más famosos de Argentina, para el horno en la región de La Matanza de la provincia de Buenos Aires, Argentina, el martes 16 de octubre de 2018. (AtlasNetwork.org Fotografía/Rodrigo Abd)

Las raíces de la cooperativa reflejan un compromiso con el espíritu emprendedor que es evidente en la gama de servicios, programas y clases a los que pueden acceder los residentes. Creada en 2001, después de que un grupo de vecinos decidiera que no quería depender de las ayudas sociales del gobierno, hoy La Juanita cuenta con una panadería, un centro de llamadas, un taller de reparación mecánica, servicios de catering y clases que enseñan a la gente inglés, técnicas de computación y animación, conocimientos de belleza y de barbería, música y danza, e incluso finanzas personales.

“Empezamos como una cooperativa formada por un grupo de trabajadores desempleados que rechazaron las transferencias monetarias del gobierno en la crisis de 2001, porque queríamos generar nuestra propia fuente de trabajo y ofrecer a la población local una educación de calidad”, explica Silvia Flores, que fue una de las fundadoras de la cooperativa y ahora es su directora ejecutiva.

Las computadoras son un paso importante para el progreso de la cooperativa, ya que se utilizan ampliamente tanto para fines administrativos como educativos. Libertad y Progreso, asociado de Atlas Network en Argentina, trabajó con funcionarios del gobierno para poner fin a un arancel permanente del 35% sobre los ordenadores portátiles y los pequeños aparatos electrónicos, que incrementaba los costos de los consumidores por encima del 100% de lo que cuestan en los países vecinos. Esta pequeña reforma de política hizo posible que La Juanita compre nuevos computadores y ayude a más estudiantes a adquirir habilidades que podrían conducir a mayores oportunidades de trabajo. El nuevo centro de llamadas de la cooperativa, que se ha convertido en una fuente de empleo local, está formado principalmente por graduados de los programas de educación en computación. Recientemente, el centro de llamadas ha conseguido contratos de alto nivel con bancos y otras empresas importantes, lo que ha creado nuevas avenidas para el crecimiento del empleo en el futuro.

Residentes trabajando en el negocio de call center de la Cooperativa La Juanita en la región de La Matanza de la provincia de Buenos Aires, Argentina, el martes 16 de octubre de 2018. (AtlasNetwork.org Fotografía/Rodrigo Abd)

Agustín Etchebarne, director general de Libertad y Progreso, sabía que bajar la tarifa tendría un fuerte impacto en la gente que lucha por ganarse la vida. “Mucha gente cree que la política pública que abarata los ordenadores es un logro abstracto”, dijo Etchebarne. “Pero no hay nada abstracto en la creación de nuevos puestos de trabajo para los pobres. Y en medio de la recesión que atraviesa Argentina, hay pocas cosas más importantes que conseguir un trabajo.”

Fabián Hamed (centro), presidente de la cooperativa, conduce a Agustín Etchebarne (derecha), director general de Libertad y Progreso, con sede en Buenos Aires, en una visita a la Panadería Comunitaria “La Masa Crítica” en la Cooperativa La Juanita en la región de La Matanza de la provincia de Buenos Aires, Argentina, el martes 16 de octubre de 2018. (AtlasNetwork.org Fotografía/Rodrigo Abd)

En “La Masa Crítica”, la panadería del lugar, las especialidades argentinas conocidas como medialunas vuelan por la puerta. El panadero jefe, Miguel, lleva varios años trabajando en la panadería, y tanto él como su equipo están contentos de que sus productos de panadería -que venden a un precio más bajo que la mayoría de las panaderías locales- tengan demanda. La Masa Crítica tiene un doble significado. Cuando La Juanita estaba en sus inicios, los administradores del gobierno regional dijeron a los organizadores de La Juanita que no podían formar una cooperativa sin una masa crítica de apoyo, y dudaron abiertamente de que el barrio pudiera apoyar la visión de los fundadores.

Carlos Nuñez, panadero de la Panadería Comunitaria “La Masa Crítica” en la Cooperativa La Juanita coloca el cartel y se prepara para abrir la panadería, en la región de La Matanza de la provincia de Buenos Aires, Argentina, el martes 16 de octubre de 2018. (AtlasNetwork.org Fotografía/Rodrigo Abd)

Afortunadamente, los burócratas se equivocaron. Así que cuando llegó el momento de ponerle nombre a la panadería, La Masa Crítica pareció la respuesta perfecta. Hoy, la panadería forma parte de una comunidad fuerte y vibrante que atiende las necesidades de miles de residentes locales cada año.

“Vienen a las 4 de la mañana a hacer el mejor pan del barrio”, dice Fabián Hamed, presidente de la cooperativa. “Es algo más que un salario. Nuestros compañeros saben que están ayudando a los demás y, como también ganan dinero, ven la posibilidad de salir adelante.” Hamed, que también dirige Potrero Digital, el programa de gestión de tecnología y diseño digital de La Juanita, habla con orgullo de uno de sus antiguos alumnos, Carlos, quien ahora enseña técnicas de repostería a otros. Hamed ha visto de primera mano la diferencia que el impacto de Carlos tiene en sus compañeros del barrio. “Gracias a Carlos, estos chicos tienen un futuro. No están en la esquina bebiendo alcohol o consumiendo drogas: tienen habilidades y pueden conseguir trabajo”.

Mauro Guarino enseña a los residentes conocimientos básicos de computación en el centro de tecnología digital en la Cooperativa La Juanita en la región de La Matanza de la provincia de Buenos Aires, Argentina, el martes 16 de octubre de 2018. (AtlasNetwork.org Fotografía/Rodrigo Abd)

“Lo que me encanta de La Juanita es que no aceptaron la asistencia social del gobierno -añadió Etchebarne-. Querían salir de la pobreza por sí mismos, así que encontraron la manera de capacitarse y crear puestos de trabajo”.

Con un enfoque en la innovación, el descubrimiento y la creación de oportunidades para que la comunidad prospere, la Cooperativa La Juanita mira hacia el futuro. La esperanza de los fundadores fue crear un espacio que fomentara la prosperidad para todos sin depender de la ayuda del gobierno, con la visión de que sus esfuerzos conducirían a un mundo mejor. “Queríamos y queremos demostrar que se puede salir adelante por nuestros propios medios, con dignidad, esfuerzo y trabajo”, afirma Flores.

“Lo que me encanta de La Juanita es que no aceptaron la asistencia social del gobierno. Querían salir de la pobreza por sí mismos-así que encontraron la manera de capacitarse y crear puestos de trabajo.” – Agustín Etchebarne

Los niños muestran sus coloridas máscaras de papel maché en el centro de cuidado infantil de la Cooperativa La Juanita en la región de La Matanza de la provincia de Buenos Aires, Argentina, el martes 16 de octubre de 2018. (AtlasNetwork.org Fotografía/Rodrigo Abd)

Mirando a los niños que pintan arcos iris gigantes, a los estudiantes que se inclinan sobre las computadoras y a los clientes que se llevan a casa sacos de medialunas con aroma a cítricos, el futuro de La Juanita parece realmente brillante.

Done a Atlas Network para apoyar a grupos como Libertad y Progreso que fomentan el desarrollo local en todo el mundo.

https://dignityunbound.org/donate

Un agradecimiento especial a Daniel Anthony por la recopilación de esta historia.

Traducción al español de IDEAS Labs.


POBREZA Y LIBERTAD – Descargá el libro haciendo click aquí.